#1 Registra tus gastos
Sí, lo sabemos, es tedioso documentar cada gasto diario, pero es necesario tener registrado lo que compramos y cuándo lo hacemos. Ya seas una persona de libreta y lápiz, o si eres más tecnológico y prefieres utilizar una app, anota cada café, viaje en Uber, etc para que tengas una noción global de cuánto gastas mensualmente. ¡Todo cuenta! Si se te pasó algo, revisa tus estados de cuenta y cartolas del banco, ahí está toda la data que necesitas.
#2 Incluye los ahorros en tu presupuesto
Pasa de la hipótesis a la acción. Haz de los ahorros una realidad. Ahora que sabes cuánto gastas puedes hacer un presupuesto de tus compras y pagos, de acuerdo a cuánto recibes mensualmente. En este plan es necesario que consideres el ahorro como parte de tus costes periódicos y trata de ir aumentando el porcentaje de ahorro mientras tengas más holgura.
#3 Encuentra maneras de cortar gastos
Como ya vas a tener documentado todos tus gastos y tendrás un presupuesto definido este es el momento de cortar gastos innecesarios. Sí, puede sonar rudo pero muchas cosas son prescindibles. Consejos que te pueden ayudar a reducir gastos: Busca actividades gratuitas, cancela membresías que no ocupas, cocina más en casa y espera antes de comprar algo.
#4 Ponte metas
El ser humano funciona mejor con objetivos a cumplir, es por eso que una buena táctica es fijar una meta de ahorro, ponte una cifra y llega a ella. El primer paso es pensar para qué quieres ahorrar, ¿Quieres una nueva adquisición? ¿Tener un fondo de emergencia? ¿O llegar tranquilo a tu jubilación? Y luego fija un número para tus objetivos a largo y corto plazo.
#5 Determina tus prioridades financieras
Ya teniendo en cuenta tus metas, puedes priorizar para qué quieres ahorrar, es decir, si tu meta es comprar una casa, es lógico que la prioridad sea ahorrar para ese objetivo en particular. Ojo, que es importante considerar un plan para tu vejez y siempre guardar dinero para la jubilación.
#6 Elige las herramientas correctas
En el mercado hay un sin número de productos para ahorrar, pero no todas son útiles para cada persona, es por eso que debes elegir tu forma de guardar dinero acorde a tus metas. Por ejemplo, si el objetivo es ahorrar a corto plazo, te conviene alternativas como una cuenta de ahorro o un depósito a plazo. Si tus planes son a largo plazo, hay más alternativas: Fondos Mutuos, Seguros con ahorro, APV, entre otros. Para más información no dudes solicitar una asesoría de expertos BICE.
#7 Haz tu ahorro automático
La memoria es frágil y para asegurar tu futuro, es necesario que lo que aportes al ahorro sea mensual, es por eso debes poner tu monto de ahorro de modo automático para que no tengas lagunas, así es mucho más sencillo planificar tu vida. Además, muchos bancos tienen la opción de dejar transacciones programadas, ¡Sácale partido! #8 Mira tus ahorros crecer Si ya cumpliste con todos los pasos anteriores, ahora es el turno de ver crecer tus ahorros. Es importante chequear cada mes el avance de tus ahorros y ver cómo se comportan, así tienes control, no sólo de tus finanzas sino de lo que ahorras para tu futuro. Para mayor información, no dudes en contar con BICE LifePlan, que te entrega la información necesaria para hacer realidad tus sueños de corto y largo plazo.
